miércoles, septiembre 20, 2006

Cuando algo se pierde (homenaje a Guso)

Dedicado a Aurora con todo mi cariño

Yo llegué a su vida cuando ya tendría un par de añitos, y me perdí su infancia de mascota de scottex.
Él llegó a nuestras vidas como un rayo de luz que alegraba todos nuestros corazones. Cuando este bonachón, que no haría daño ni a una mosca a pesar de poder con todos nosotros, entraba en la habitación, atraía todas las miradas, todos los mimos, y todas las caricias. Su sola presencia ya hacía que te sintieras mejor, que te apeteciera abrazarlo y jugar con él; y él se prestaba a este juego sin rechistar, sin una queja, a pesar de las mil putadas que se le hicieran.
A pesar de no poder comunicarnos con él (aunque a veces pareciera que estaba a punto de ponerse a hablar), ha sido una de las mejores compañías de las que he podido disfrutar las pocas veces que he estado con él (lástima de alergia).
La semana de vacaciones que pasamos juntos con Guso fueron la mar de divertidas.
Pero por un azar funesto del destino, una enfermedad incurable, y cuya causa es todavía desconocida, se lo ha llevado en pocos meses, y ayer acabó con su vida. Aun no nos hacemos a la idea de lo que ha pasado; la vida es muy injusta y nuestro pobre Guso no se merecía esto. Aun estaba en la plenitud de su vida.

Este post es un homenaje a este amigo, nunca mejor dicho el mejor amigo del hombre; un Labrador de 6 años y 30 y pico kilos de peso, que te comerías a besos.
Descansa en Paz, nuestro querido Guso; nunca te olvidaremos.

pd. Aurora, en estos momentos sabes que tienes todo nuestro apoyo. Un abrazo muy grande.
ppd. En cuanto tenga algunas fotos las engancho aquí.